En su documental, el cineasta canadiense Barry Stevens, que tiene 600 medios hermanos en todo el mundo, decide conocer a su familia, informó Deutsche Welle.
Los donantes de esperma anónimos podrían estar dispuestos a crear historia. Cada vez más niños nacidos con semen de estos donantes quieren saber quiénes son sus padres biológicos.
Concebido con esperma de un donante anónimo, Stevens siente curiosidad por buscar a los miembros de su familia.
Sin embargo, la idea no es nueva. Con los avances en la ciencia del ADN, las personas concebidas a partir de espermatozoides anónimos pueden conectarse con sus familias extensas. Dado que ahora hay un mayor acceso a los bancos de datos, las personas también exigen conocer a sus padres biológicos.
Mientras unos quieren saber por curiosidad, a otros les preocupan las enfermedades hereditarias. A algunos también les preocupa que puedan enamorarse accidentalmente de sus medios hermanos sin saber que en realidad están relacionados.
Si bien el anonimato de los donantes solía ser una prioridad, los procedimientos legales en la materia ahora están cambiando considerando el derecho de las personas a conocer a su padre biológico.